Rogelio es acusado de violar a su propia hija en reiteradas oportunidades, la sometió a vejámenes desde que la menor tenía ocho años y actualmente tiene 13, la denuncia fue interpuesta por la madre de la menor luego que la niña revelara las atrocidades que le hacía su padre quien fue apresado cuando realizaba sus labores de albañilería en un pueblo alejado de Oruro.
Con llanto y desesperación, la progenitora denunció ante la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv) de Oruro que luego de notar una conducta depresiva a su hija la obligó a revelarle qué estaba ocurriendo con ella, al principio no quiso decir nada, finalmente se puso a llorar y contó a su madre las violaciones que sufrió por parte de su padre en recurrentes oportunidades.
Los policías, según el periódico La Patria, interrogaron a la menor, quien detalló que en al menos cuatro oportunidades vivió horrendos momentos en manos de su desquiciado progenitor, quien la obligaba a quitarse la ropa y luego procedía a violarla.
Después de su captura, el sindicado fue remitido al Ministerio Público que pidió al juez la detención preventiva en la cárcel del imputado por existir suficientes elementos de convicción del vejamen que sufrió la menor, ya que el examen médico forense confirmó desgarres recientes.
El imputado fue enviado con detención preventiva a la cárcel de San Pedro por determinación que dictó el juez Franco Sanabria, tras celebrarse la audiencia de medidas cautelares. La defensa del acusado no desvirtuó los peligros de fuga y obstaculización.
El hombre permanecerá en la cárcel mientras dure la investigación, puesto que se encontraron indicios suficientes de su participación en el hecho y no se desestimaron los riesgos procesales.
La menor recibe una terapia integral por parte de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia.
